miércoles, 13 de agosto de 2014

Si me necesitas, silba


Todo empezó, como tantas cosas en esta vida, con una conversación entre dos amigos, con una apuesta que en un principio debió de sonar a fanfarronada. Durante un día de pesca, entre trago y trago, Howard Hawks aseguró a su amigo Ernest Hemingway ser capaz de realizar una gran película con la peor de sus novelas. La peor, a juicio del director, era una obra corta titulada Tener y no tener, la historia de un marino que, acuciado por problemas económicos, resuelve dedicarse al contrabando.

viernes, 1 de agosto de 2014

Trece canciones de verano (que no son las típicas)


Las canciones veraniegas son casi un género en sí mismo, desde Georgie Dann a King África, pasando por el Aquí no hay playa de los Refrescos o los inevitables e imprescindibles Beach Boys, con su batería de Surfin'-songs (habría que distinguir, eso sí, como apuntábamos el otro día, entre canción del verano y canción veraniega, que son dos subconjuntos diferentes, aunque a menudo intersecten). Playa, olas, tablas de surf y chicas en bikini: cóctel irresistible. Estas trece canciones, sin embargo, no hablan de eso, o no demasiado, o no todas. Estas trece canciones sí hablan de amores de verano y desamores de invierno (o viceversa), de heridas que cicatrizan en el mar, de días interminables y noches sin fin, de lo inhóspito que puede resultar el verano y hasta de asesinatos y esqueletos fosforescentes Son canciones de verano, pero no son, creo, las típicas. Requisito: todas en castellano. Dato: en ninguna, salvo descuido, aparece la palabra surf.